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En el tip anterior te hablaba de la importancia de tener una web hoy en día y los primeros pasos para tener en cuenta en el caso que la tengas o te decidas a crearla. Recuerda que la web es una ventana a tu empresa, por lo que su fin de un modo u otro es conseguir que te conozcan y que tus clientes adquieran tus productos o servicios de una manera u otra.
Con estas simples preguntas te posicionarás en la realidad de tu web y podrás orientarte hacia nuevos retos:
- ¿Tu web sirve para? (informar, relacionarse, vender, etc.)
- ¿Cuándo fue la última vez que publicaste algo en la web?
- ¿Sabes qué repercusión ha tenido?
- ¿Sabrías identificar el coste que te ha supuesto hacer la web?
- Si no la has hecho y te estás planteando hacerla, ¿sabrías cuál es su coste? Ten en cuenta todo, aspectos técnicos, diseño, recursos necesarios, tiempo de gestión, subcontratación de servicios, etc.
- Si a través de tu web se pueden adquirir productos o servicios, ¿cuánto has vendido por esta ventana de tu empresa en el último mes?, ¿y el año pasado?
Como ves son unas simples preguntas que dándoles respuesta te ayudarán a orientar el uso de esta potente herramienta.